Tattoo curioso donde los haya.
Este es el caso de una chica que vino y quería los dos nombres de sus niñas y una mariposita, letra fina y cualquier mariposa que se me ocurriera con algún punto de color. Pero lo quería YA. Si no era YA probablemente se lo pensaría más y no se lo haría.
Hasta ahí bien pero es que llevaba colgando del cuello un aparatito llamado holter, con unos electrodos pegados, que le tenía que medir el ritmo cardíaco durante un día o dos. Yo vi eso y le dije que prefería esperar a que se lo quitaran por lo que pudiese pasar. Pero ella estaba convencida que tenía que ser ahora o nunca así que móvil en mano y llamó a su médico para preguntar si se podía hacer el tattoo. Le dijeron que lo único que podía pasar es que en el historial apareciera alguna variación por nerviosismo o algo así, así que preparé el boceto y la sala y a tatuar.
La verdad no creo que se le alterara mucho el historial del corazón porque parecía que no le estuviese haciendo nada, casi se podría haber quedado durmiendo y todo.
Fecha: 10/08/2012
Nombre: Ana Vanessa V. M.
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